“Rudolf Steiner nació en 1861 y murió en 1925. En su autobiografía, El curso de mi vida, deja bien claro que los problemas tratados en La Filosofía de la Libertad desempeñaron un papel destacado en su vida.
Su infancia transcurrió en el campo austriaco, donde
su padre era jefe de estación. A los ocho años, Steiner ya era consciente de
las cosas y los seres que no se ven, así como de los que sí se ven. Al escribir
sobre sus experiencias a esa edad, dijo: "... la realidad del mundo
espiritual era para mí tan cierta como la realidad física. Sin embargo, sentía
la necesidad de una especie de justificación de esta suposición".
Reconociendo la capacidad del muchacho, su padre le
envió a la Realschule de Wiener Neustadt, y más tarde a la Universidad Técnica
de Viena. Aquí Steiner tuvo que mantenerse a sí mismo, mediante becas y clases
particulares. Estudiando y dominando muchas más materias de las que figuraban
en su plan de estudios, siempre volvía al problema de conocerse a sí mismo. Era
muy consciente: cuando hacemos en la experiencia de sí como un yo, ya estamos
en el mundo del espíritu. Aunque participó en todas las actividades sociales
que se desarrollaban a su alrededor -en las artes, en las ciencias, incluso en
la política-, escribió que "mucho más vital era entonces la necesidad de
encontrar una respuesta a la pregunta: ¿Hasta dónde es posible probar que en el
pensamiento humano quien realmente actúa es el espíritu?"
Hizo un estudio profundo de la filosofía, en
particular de los escritos de Kant, pero en ninguna parte encontró una forma de pensar que pudiera ser llevada
tan lejos como la percepción del mundo espiritual. De este modo, Steiner se vio obligado a desarrollar una teoría
del conocimiento a partir de su propia búsqueda de la verdad, que partió de una
experiencia directa de la naturaleza espiritual del pensamiento.
Como estudiante, la
capacidad científica de Steiner fue reconocida cuando se le pidió que editara
los escritos de Goethe sobre la naturaleza. Reconoció en Goethe a alguien que había sido capaz de percibir lo
espiritual en la naturaleza, aunque no lo llevó tan lejos como a una percepción directa del espíritu. Steiner
pudo aportar una nueva comprensión a la obra científica de Goethe gracias a su
visión de la naturaleza, de su percepción de la naturaleza. Como ninguna teoría
filosófica existente podía tener en cuenta este tipo de visión, y como Goethe
nunca había declarado explícitamente cuál era su filosofía de la vida, Steiner
cubrió esta necesidad publicando, en 1886, un libro introductorio titulado La
teoría del Conocimiento Implícita en la Concepción del Mundo de Goethe. Sus
introducciones a los diversos volúmenes y secciones de los escritos científicos
de Goethe (1883-97) se han recogido en el libro Goethe el científico. Se trata
de valiosas contribuciones a la filosofía de la ciencia.”
Durante este tiempo, sus pensamientos sobre su propia
filosofía fueron madurando poco a poco. En el año 1888 conoció a Eduard von
Hartmann, con quien ya había mantenido una larga correspondencia. Describe el efecto escalofriante que tuvo en él el modo
en que este filósofo del pesimismo negaba que el pensamiento pudiera llegar a
la realidad, sino que debía tratar
siempre con ilusiones. Steiner ya
tenía claro en su mente cómo debían superarse esos obstáculos. No se detuvo en el problema del
conocimiento, sino que llevó sus ideas de este ámbito al campo de la ética,
para ayudarle a tratar el problema de la libertad humana. Quería demostrar que la moral podía tener un fundamento seguro
sin basarse en reglas de conducta impuestas.
Mientras tanto, su trabajo de edición
le había llevado lejos de su querida Viena, a Weimar. Aquí Steiner se enfrentó a la tarea de presentar sus ideas al
mundo. Sus observaciones de lo
espiritual tenían toda la exactitud de una ciencia y, sin embargo, su
experiencia de la realidad de las ideas se asemejaba en cierto modo a la
experiencia del místico. El misticismo presenta la intensidad del
conocimiento inmediato con convicción, pero sólo se ocupa de las impresiones
subjetivas; no se ocupa de la realidad exterior al hombre. La ciencia, en cambio, consiste en ideas
sobre el mundo, aunque las ideas sean principalmente materialistas. Partiendo
de la naturaleza espiritual del pensamiento, Steiner pudo formar ideas que se
refieren al mundo espiritual de la misma manera que las ideas de la ciencia
natural se refieren a lo físico. Así, pudo describir su filosofía como el resultado de la "observación
introspectiva siguiendo los métodos de
la Ciencia Natural". Presentó
por primera vez un esbozo de sus ideas en su tesis doctoral, La verdad y el conocimiento,
que llevaba el subtítulo "Preludio a una 'Filosofía de la Libertad"
..Extracto Parte II: Introducción a la presentación del Libro La Filosofía de la Libertad, de Rudolf Steiner, por Michael Wilson, 1961.
Continuara...
traducción Linda Rgamez
No hay comentarios:
Publicar un comentario